lunes, 25 de junio de 2012

no me quisiste cuando se supone que debías quererme

 ¿Te sientes culpable? ¿Culpable de qué? Ah sí, de haberme echo sentir la persona más gilipollas y estúpida de todo el planeta tierra. O de haberme engañado durante tanto tiempo.
Pero, ¿sabes? Enhorabuena, ¡has aguantado mucho tiempo tus falsas palabras! ¡Quién debe sentirse orgulloso eres tú, por saber mentir tan bien! 
Pero, ¿sabes el problema? El problema es que, no sabías que detrás de tus mentiras, había una chica, una chica, que tiene sentimientos, que, al igual que sentía tanto amor hacia ti, puede sentir el dolor, el dolor de darse cuenta que mientras ella te quería tu estabas con otra. El dolor de pensar que todas y cada una de la palabras que decías eran falsas. Odio que esto tenga que acabar así, cada uno por su lado, ya no sabré nada más de ti, ni si estás bien o mal, e intentar ayudarte, ya no habrá ningún saludo que me pueda sacar una sonrisa, ni habrá otro 'te amo' que me crea. Ya no habrá nada de eso. Ahora seremos dos desconocidos, cada uno por su lado, como si nada de esto hubiera pasado.
Lo increíble es que, tú estás bien, a ti nada de esto te importa, no haces ni el más mínimo esfuerzo por arreglarlo, ¡nada! y, mientras yo, aquí, como una gilipollas esperando saber algo de ti.
La verdad, me da pena, me da pena que una persona como tú, aún no sepa lo que es sentir el más mínimo sentimiento por una persona, me da pena que, a una persona como tú, no le duela hacer daño.
Pero, repito, siéntete orgulloso, has aguantando mucho tiempo esta inmensa farsa, ahora todo se acabó, tú por tú lado, yo por el mío... 
¿Sabes? Yo no quería esto... yo quería estar contigo siempre, yo tenía esperanza de volverte a abrazar, yo, te amaba tanto que estuve esperando meses y meses para volver a verte, TE QUISE, Y TE QUIERO... Te estuve respetando, y tú, me lo pagas así.
¡Gracias! Gracias por haberme echo sentir como una grandísima mierda. 
Pero, has de saber, que, mientras la gente me decía que te dejara, que no valías la pena, yo, puse las manos en el fuego por ti, puse toda mí confianza en ti.
Aún así, gracias por todo, me hiciste pasar buenos momentos, cerca, y lejos de ti... Me ayudaste mucho, y me diste consejos como nunca ningún amigo me los ha dado

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